jueves, 5 de marzo de 2009

Aventuras de una seudo cinéfila

II El formato 3D es la onda

Nunca había visto una película en tercera dimensión. Cuando era niña imaginaba cómo sería esa experiencia, y pensaba que ver a un personaje salir de la pantalla debía ser una maravilla. Hace unos días fui a ver Coraline y la Puerta Secreta en formato 3D, y debo decir que sí era lo que esperaba. Claro, al final uno acaba con los ojos cansados y la nariz adolorida, porque los lentes no son los más cómodos.

Apenas comienzan las imágenes, uno siente que los objetos salen de la pantalla. Tanto el estilo de la animación como el colorido de las escenas son muy disfrutables, especialmente aquellas donde aparece el jardín. Desgraciadamente la película no da para más. Sí, los personajes son un tanto raros, originales y macabros, pero ni siquiera la personalidad de la protagonista está bien trazada, al menos no encontré una frase o un gesto característico, algo que la distinguiera de las demás animaciones. La historia es interesante, pero todos los líos los resuelven de una manera muy simple, como si hubiesen tenido que recortar muchas cosas por falta de tiempo; ahora habrá que conseguir el libro para saber si omitieron datos relevantes o si la obra fue respetada.

De todos modos vale la pena verla, pero en tercera dimensión, si no, no.

2 comentarios:

elisucha dijo...

hola!

yo también vi la película de coraline, y concuerdo contigo en que el desenlace es simple, pero si mal no recuerdo, la publicidad que vi, los carteles, decían "tu primera película de miedo", yo supongo que está estructurada de esa manera para lo que se cree que capta el público infantil.

por cierto, ¿este blog es de estudiantes de letras?

Limón dijo...

es de ex estudiantes de letras, amigos de un taller. ¿Quién eres tú?

Gracias por leer este bog tan descuidado...