I
jugando a esos pasadizos
de laberintos a ninguna parte.
lejos,
de mí.
arrebatado.
de todos.
zurciendo zurciendo
las manos hasta ya no reconocerlas,
tocando palpando
rostros y rostros
grandes tesoros ojos dorados cuya delicia
son muslos gargantas,
nervadura,
descanso en la muerte,
tierra a la lejanía,
por unos segundos.
II
con la cabeza rota
con el cuerpo roto
con el tiempo roto
con la desmemoria rota
con la rotura de la piel
y expuesto el aire al corazón.
bajo la tierra.
III
no hay tierra,
no hay segundos allá,
en la lejanía.
IV
queda entonces la cabeza rota con el tiempo roto y la rotura cuerpo,
queda entonces allá en la lejanía los segundos aparentes como trastes inútiles,
queda entonces lo roto, los laberintos-pasadizos-a-ningún-lado.
la delicia del juego.
lo otro ,
allá. en la lejanía.
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