Título original: No Country for Old MenPaís: USA Productora: Miramax Films Director: Ethan Coen, Joel Coen Guión: Ethan Coen, Joel Coen Reparto: Tommy Lee Jones, Javier Bardem, Josh Brolin, Garret Dillahunt, Barry Corbin, Kelly Macdonald, Woody Harrelson, Stephen Root, Barry Corbin, James Brolin
El mundo se ha vuelto un lugar inseguro e incomprensible, y se cae ante los ojos de un viejo alguacil que ha sido testigo de la crueldad del ser humano. Y ni siquiera él puede dar una explicación, ni siquiera él puede decir en qué momento comenzó a reinar el absurdo en el comportamiento humano. Ahora está atrapado en el hastío, en la burocracia laboral, en el desencanto de la edad.
La nueva película de los hermanos Coen se desarrolla bajo este contexto, y es presentada a los espectadores a través de una historia simple a primera vista, pero que se vuelve original gracias a los pequeños detalles: Un hombre encuentra una maleta llena de dinero y sabe que tarde o temprano alguien vendrá por él, así que decide huir.
Y el asesino entra a cuadro. Anton Chigurh, interpretado por Javier Bardem, es el claro ejemplo de la decadencia de la época, el criminal de sangre fría –que tiene su propia lógica– que se encargará de llevar el ritmo de la tensión en el filme.
Más allá de los lugares comunes o las situaciones cotidianas, los detalles mínimos son los que envuelven en novedad esta historia. De este modo, la ironía de los diálogos, el corte de cabello de Bardem o el arma homicida, son los elementos imprescindibles que le dan congruencia a No country for old men.
A pesar de ello, a pesar de la buena fotografía, las actuaciones de calidad, la atmósfera creada, algo no termina de cuajar. Quizá no es bueno intelectualizar tanto a personajes tan complejos, quizá solamente yo no andaba de humor. Sí, vale la pena pagar el boleto, pero desafortunadamente sólo puede ser clasificada con un “buena” a secas…
El mundo se ha vuelto un lugar inseguro e incomprensible, y se cae ante los ojos de un viejo alguacil que ha sido testigo de la crueldad del ser humano. Y ni siquiera él puede dar una explicación, ni siquiera él puede decir en qué momento comenzó a reinar el absurdo en el comportamiento humano. Ahora está atrapado en el hastío, en la burocracia laboral, en el desencanto de la edad.
La nueva película de los hermanos Coen se desarrolla bajo este contexto, y es presentada a los espectadores a través de una historia simple a primera vista, pero que se vuelve original gracias a los pequeños detalles: Un hombre encuentra una maleta llena de dinero y sabe que tarde o temprano alguien vendrá por él, así que decide huir.
Y el asesino entra a cuadro. Anton Chigurh, interpretado por Javier Bardem, es el claro ejemplo de la decadencia de la época, el criminal de sangre fría –que tiene su propia lógica– que se encargará de llevar el ritmo de la tensión en el filme.
Más allá de los lugares comunes o las situaciones cotidianas, los detalles mínimos son los que envuelven en novedad esta historia. De este modo, la ironía de los diálogos, el corte de cabello de Bardem o el arma homicida, son los elementos imprescindibles que le dan congruencia a No country for old men.
A pesar de ello, a pesar de la buena fotografía, las actuaciones de calidad, la atmósfera creada, algo no termina de cuajar. Quizá no es bueno intelectualizar tanto a personajes tan complejos, quizá solamente yo no andaba de humor. Sí, vale la pena pagar el boleto, pero desafortunadamente sólo puede ser clasificada con un “buena” a secas…
3 comentarios:
Yo amé la ambientación en el sureste texano que he atravesado tantas veces en automóvil.
Tiene un aire de western posmoderno exquisito sobre las secas praderas de texas.
yare ke pdo!!!!!!!!!! como tas!!!!!!!!! wamas o ke???? oye tan chidos tus post peroooooooo(con tonadita de mitsuku) me gustaria ke fueran un poco mas chiskiados jejeje
saludos aki te dejo a poem
see ya!
Siempre que me pueda dibujar
sobre un naranja impar
como un sueño que no tiene dueño
voy tejiendo tres intentos de color.
Sólo soy un bicho de cristal,
sólo soy de luz piramidal,
que se pierde cuando no se mueve
y se siente un pez luna en tu interior
cuando un día sin sol
entre en tu habitación ...
Sólo soy de cera y de papel,
sólo soy lo que no quiero ser,
y no entiendo cómo es que el tiempo
va tejiendo mis intentos de color
cuando un día sin sol
entre en tu habitación ...
Yare, sigue siento tan linda persona y asi de alegre.
Saluditos de La Sara
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