martes, 2 de septiembre de 2008

Nuevo León, estado de sitio


(El Porvenir, 02/09/08)

Deja balacera heridos, detenidos y policías cesados
Por: José Ramón Rodríguez / Gilberto López Betancourt, Miércoles, 03 de Septiembre de 2008

Al menos 3 heridos, 30 detenidos y por lo menos 4 oficiales de Seguridad Pública del Estado cesados de sus cargos, dejó el incidente registrado en la Independencia.

A plena luz del día la seguridad en calles de la colonia Independencia, al sur de Monterrey, se vio quebrantada ayer, después de registrarse una balacera que dejó como resultado 3 heridos, en total 30 detenidos, y por lo menos 4 oficiales de Seguridad Pública del Estado, cesados de sus cargos.

Los oficiales que serán cesados de sus puestos y cuyos nombres no fueron dados a conocer, derivaron debido a que dos de ellos que arribaron en primera instancia al sitio, en lugar de intervenir en los hechos, decidieron retirarse inmediatamente del sector.

Mientras que los otros dos elementos, se encontraban muy cerca del lugar, a escasas cuadras en que se llevaba a cabo la balacera y a pesar de recibir indicaciones para arribar de inmediato al lugar, desacataron la orden que les fue conferida.

Cabe señalar que durante los hechos, otros oficiales de grupos especiales de la Policía Estatal, que arribaron tras más de 12 a 15 minutos al sitio, efectuaron la detención de cuatro personas involucradas directamente en el altercado entre pandillas rivales.

De las cuatro personas involucradas directamente en los hechos, dos de ellos resultaron lesionados por proyectiles de arma de fuego, al enfrentarse a los servidores públicos estatales, quienes en el cumplimiento de su deber repelieron la agresión de que fueron objeto.

Los restantes 26 presuntos integrantes de pandillas, fueron detenidos horas más tarde de registrada la balacera, durante un operativo que fue implementado tanto por elementos del Ejército Mexicano y autoridades Federales, en colonias asentadas en la zona sur de Monterrey.

Comentario:


Vivo a unas cuantas cuadras del lugar donde se registró la balacera, en calle Martín de Zavala 531 sur, en la Colonia Nuevas Colonias. A nadie en la colonia le sorprende, a estas alturas y aún menos debería sorprender a los "medios de comunicación", que las "autoridades" municipales, federales y estatales no hayan llegado a tiempo al lugar de los hechos; tampoco sorprende que las dos patrullas que sí llegaron en el momento no se hayan involucrado en el tiroteo. Todos sabemos que la VIOLENCIA ha avasallado a instituciones, municipios, estados y al país mismo.

Zetas, secuestros, ejecuciones, tiroteos, todo aquello que creíamos más o menos lejano, está a la vuelta de la esquina; justo hace unos días me acabo de enterar de secuestros perpetrados por los “zetas” en colonias como Revolución Proletaria y Sierra Ventana; los testimonios me fueron dados por familiares de lo secuestrados. Estas desapariciones pocas veces se denuncian, obviamente por miedo a las represalias, “calladito te ves más bonito” me mencionó un ciudadano que me contó el hecho.

Y ahora los medios se visten de héroes y pregonan que “fueron los primeros en llegar a los hechos”, caen en la denuncia facilona, sin profundidad, se asombran porque la policía municipal llegó treinta minutos tarde (de qué se asombran si eso es lo normal, en el mejor de los casos), pero no se cuestionan que ya son más de 30 años que las zonas de la Independencia, la Pio X y las Nuevas Colonias siguen apareciendo como colonias “conflictivas”; qué se ha hecho ¿treinta minutos harán la diferencia?

Ahora, tanto en mi colonia como en Revolución Proletaria y Sierra Ventana (en la Indepe supongo que es lo mismo) la “moda” –por llamarlo de alguna manera, es tenerle miedo a los zetas, hablar de ellos, dicen: mira ese camionetón de seguro es de un zeta o un sicario, algunos otros aseguran saber quiénes son, dónde viven, cuáles son sus “rangos” y hasta donde operan: “lo hacen a lo descarado, esos gueyes no se andan con chingaderas, no le tienen miedo ni a los sorchos”. Desearía que fueran exageraciones, pero no, efectivamente los zetas, sicarios, levantones y ejecuciones ya son moneda corriente en las colonias en donde vivimos ¿y el plan para la seguridad? ¿y la marcha? ¿y los federales? ¿ y el ejército? Los medios se sorprenden ¡30 minutos tarde! Qué barbaridad.

Las “pandillas” no son nada nuevo, recuerdo cuando niño presenciaba las batallas campales entre Gárgolas y Pachecos, eran los más sonados de aquellos tiempos en la colonia –de mi cuadra no salía el canal 12, como ahorita en la Indepe; luego se calmó todo, unos años, la banda se “cantoneó”, o los corrieron cuando construyeron el túnel de la Loma Larga (vino el ejército y todo, no pararán al narco pero ah qué buenos son pa desalojar posesionarios). Ahora los chavos, los hijos de los que quedaron en la cuadra son los que están armando “el desmadre”, con una gran diferencia: en lugar de tirar piedras, tiran balazos. En el mes de agosto se registraron dos balaceras en la colonia Revolución Proletaria, fueron disputas entre “pandillas”, pero no salió nada en los periódicos, ni tampoco en la televisión, no sólo llegaron tarde (los “medios” y la policía) de hecho nunca llegaron.

No creo en la “mano dura”, y en lo que dicen las señoras que entrevistan en la tele: “es que hace falta más vigilancia” sí, hace más vigilancia pero no se reduce sólo a eso. Hace falta una verdadera preocupación por parte de las instituciones y los ciudadanos para comprender una realidad tan compleja como la que les toca vivir a los chavos que pertenecen a bandas. Los zetas, sicarios, narquillos, esos son harina de otro costal; aunque debe decirse: es una broncón que ya está explotando, que las bandas se hayan empezado involucrar con este tipo de organizaciones criminales ¿y eso quién lo atiende?
¿quién lo ha investigado o se ha preocupado por analizar este fenómeno?

Mi mamá me cuenta que al mediodía nadie quería salir de las casas, la calle “se vació”, no había nadie, las mamás bajaron casi corriendo por los niños que salían de la primaria, “no los fueran a balear”. Llegué a mi casa como a las 7:00 ó 7:30, no había nadie en las calles, pasaron como 6 patrullas, federales, estatales y municipales, justo cuando acababa de llegar, tampoco nadie quería salir, pues la policía andaba suelta en la cuadra, trepando a cualquiera, al que se dejara, sin motivo alguno… esa es la solución al problema de la violencia: la operación rastillo. Por eso uno ya ni puede salir a las calles, luego lo secuestran los zetas, o los policías.

1 comentario:

Joel Martínez G. dijo...

Excelente aportación. Hice referencia a ella en mi propio blog.

Muchos saludos.